La lluvia no da tregua desde hace algunos días en esa provincia, y en la localidad de La Madrid crece la incertidumbre sobre lo que pasará. También hay temor en Taco Ralo.
Si bien el Comité de Emergencia de la provincia de Tucumán informó que los ríos del sur están controlados por el momento y sus caudales que aumentaron están en los límites esperables, los colaboradores de ACDI que cumplen funciones en las localidades de Lamadrid y Taco Ralo, donde la entidad ejecuta acciones en el marco del Plan Nacional de Protección Social, están en alerta ante una nueva emergencia hídrica.
En el primer lugar, teniendo en cuenta que una familia ya debió abandonar su vivienda producto del agua que ingresó a su hogar, tal como sucedió en gran parte de este paraje el año pasado, se informó que las supervisoras del Ministerio de Educación de esa provincia comenzaron a coordinar acciones con directivos de distintas escuelas de la región para preparar el terreno en caso de tener que albergar gente.
Paralelamente se comunicó a los pobladores del sector que se instaló una sirena en el destacamento policial que, en teoría, se accionará a modo de aviso si las autoridades comunican que la inundación es inevitable.
Por su parte en la localidad de Taco Ralo, que por su ubicación está menos expuesta a inundaciones, una de las promotoras del equipoque acompaña día a día las familias del paraje Los Pérez, Laura Carabajal, dio aviso que ya se comenzó a realizar un acompañamiento exhaustivo para paliar las necesidades de la zona que quedó aislada por la inundación de los accesos.
Para destacar
Cabe recordar que en abril del 2017, la localidad tucumana de Lamadrid quedó casi en su totalidad bajo el agua debido a las fuertes lluvias que azotaron la zona y a la crecida del río Marapa que obligó a más de 6.000 pobladores a evacuar.
Estas inundaciones agravaron la situación social existente en las localidades de la región, lo que demandó un fortalecimiento de las acciones de asistencia. En este sentido, por impulso del ministerio de Desarrollo Social Nación ACDI comenzó a ejecutar allí, a partir de agosto de ese año, el Plan Nacional de Protección Social en dos localidades del sudeste de la provincia de Tucumán, Lamadrid y Taco Ralo del Departamento Graneros, donde se registraron los mayores indicadores urgentes de vulnerabilidad social debido al histórico aislamiento de la región, alejada de los centros de toma de decisión política y de concentración de los servicios sociales; y al impacto del cambio climático y de los procesos de degradación de los recursos naturales, que en los últimos años exacerbaron su vulnerabilidad ambiental.
El Plan Nacional de Protección Social retoma factores positivos y los promueve a través del Acompañamiento Familiar, con el objetivo de permitir a las familias de superar sus dificultades, respetando su libertad y despertando su responsabilidad, autonomía y autogestión; y el Desarrollo Comunitario, que tiene como objetivo promover iniciativas que impacten positivamente en el desarrollo humano de los beneficiarios y del resto de la comunidad a través del desarrollo de capacidades y oportunidades para la efectiva inclusión de los adultos en los hogares al trabajo y la actividad económica.
Las familias beneficiarias son actualmente 250 familias, las cuales según las mediciones del indicador de hacinamiento totalizan unas 1.750 personas.