La Universidad Nacional del Litoral (UNL) aprobó el Proyecto de Extensión de Interés Social (PEIS) “Artes para la cohesión social de los adolescentes del Barrio Yapeyú”. Esta iniciativa será coordinada por ACDI y ejecutada durante todo el año lectivo 2017 con el objetivo de fortalecer las acciones de la asociación y la universidad en el barrio Yapeyú de la Ciudad de Santa Fe.
Este proyecto tiene como principal propósito promover la inclusión socio-cultural, la convivencia y la cohesión comunitaria de los adolescentes del barrio Yapeyú, ampliando la oferta cultural, artística y recreativa de los jóvenes del lugar, brindándoles talleres de artes plásticas y danza.
Gracias a este proyecto de Extensión, a partir de abril los jóvenes de Yapeyú podrán acceder a 20 horas semanales de talleres: 10 horas de danza y 10 horas de artes plásticas. La definición y planificación de las actividades ha sido realizada a través de un proceso de participación que ha involucrado directamente a los beneficiarios, generando así una primera instancia de inclusión de tipo cultural.
Cada espacio del taller estará a cargo de un becario de la UNL acompañado por un voluntario universitario, por un total de diez voluntarios y dos becarios involucrados.
Las actividades se realizarán en colaboración con el Centro Vecinal Ceferino Namuncurá, y se estima que los beneficiarios del proyecto serán al menos 120.
La introducción de talleres artísticos surge en paralelo a la ejecución del proyecto de Voluntariado Universitario “Enseñar y aprender a estudiar”, como respuesta a la demanda cultural y recreativa expresada por las autoridades escolares.
¿Por qué promover la cultura para llenar la falta de cohesión en las relaciones sociales?
La cultura puede reducir la exclusión social a partir de su capacidad de promover la adquisición de conocimientos y competencias, facultad de mejorar la autoestima y la confianza en uno mismo.
El acceso y la participación cultural permiten construir y fortalecer la identidad de cada persona, confiriendo un significado a elecciones y experiencias. Esta es la razón por la cual los proyectos y las políticas culturales deben ser planificados a través de un proceso de participación directa.
En una sociedad caracterizada por la fragmentación, la promoción cultural interviene para llenar la falta de cohesión en las relaciones sociales. Los proyectos de promoción artística y cultural favorecen acciones basadas en las necesidades reales, implementan procesos de planificación participativa, se designan de forma colectiva, favorecen el desarrollo de capacidades en los beneficiarios y producen otras experiencias significativas.
Este proyecto responde entonces tanto a la necesidad de establecer relaciones significativas entre los adolescentes del barrio y la realidad externa, cómo a su necesidad de recuperar la autoestima. De allí el valor de contribuir con la educación artística de estos jóvenes, orientada a desarrollar capacidades de percepción, exploración y comprensión, así como las de expresión y comunicación, posibilitando que los sujetos puedan crear, comprender y valorar sus propias producciones y las de los otros.