El intercambio de amor y acompañamiento entre los protagonistas del programa Padrinos Solidarios suele manifestarse a través de cartas, por eso una docente europea tuvo la brillante idea de hacer participar a su clase en un texto que ya llegó a manos de un ahijado santafesino.

Desde hace ya varios años Wilma acompaña la educación a distancia de Rodrigo, un niño de 12 años que asiste a la escuela Santa Lucía, del barrio homónimo, de la ciudad capital de la provincia de Santa Fe. El acercamiento entre ambos siempre estuvo puesto en las cartas, donde el pequeño suele contarle sobre sus experiencias con amigos, familiares, compañeros de escuela y también de fútbol, su deporte favorito.

Wilma por su parte ya le manifestó al nene que trabaja como docente de español en su ciudad natal, Venecia. Allí este año tiene inscriptos más de 200 estudiantes de entre 11 y 13 años, muchos de los cuales ya están al tanto de su incursión en el programa Padrinos Solidarios.

En ese contexto y a los fines de demostrarle tanto a Rodrigo como a sus alumnos de qué se trata el programa, la docente europea decidió armar una carta colectiva entre los aprendices del idioma madre de los argentinos y se la envío al santafesino.

En el texto se puede observar cómo los niños se interesan por los gustos y costumbres del pequeño Rodrigo. Además, los chicos le contaron alguna de sus historias y a través de la docente hicieron llegar a los responsables de Padrinos Solidarios la solicitud de hacer en el futuro una videoconferencia a través de Skype para conocerse los rostros.

¿Te resulta original la propuesta?

Contanos qué te parece y si te animás a sumarte a Padrinos Solidarios. Las inscripciones siempre están abiertas.

Padrinos Solidarios es un programa de padrinazgo a distancia en el que una persona (o un grupo de personas) que vive en otra ciudad ayuda económicamente a un niño o adolescente en situación de pobreza, a través de diversas actividades y proyectos de educación y promoción social.

El programa permite facilitar el acceso a educación, atención de la salud, alimento y vestimenta, pero sin alterar las condiciones actuales de vida del niño, para que pueda crecer dentro de su entorno y en el respeto de su familia.

El interés fundamental es colaborar con el crecimiento de los niños, no sólo a nivel material, sino compartiendo las necesidades y ayudando a ampliar el horizonte de posibilidades a través de la educación. Es decir, que con el tiempo se le brinde a la vez la contención y el acompañamiento de mayores que velan por él y siguen con afecto su desarrollo.

Los padrinazgos a distancia son coordinados en mayor medida por asistentes sociales o docentes que siguen de cerca la realidad del niño y conocen su situación, su familia y sus necesidades. Por eso esta ayuda puede ser más que una ayuda material, ya que la pequeña cuota que aporta el padrino posibilita el trabajo de toda una red de personas involucradas en la educación de los niños.

La propuesta, considerada uno de los ejes del trabajo que ACDI desarrolla en el área educación, todos los años apuesta a su crecimiento y continuidad. Es por ello que en este 2019 ya abrió la convocatoria a nuevas adhesiones.

Para obtener más información, escribir al mail padrinossolidarios@acdi.org.ar o llamar al teléfono 4566049, en el horario de 9 a 13.